Cuánto duran los neumáticos: factores que afectan a su longevidad

Para todo conductor es fundamental saber cuánto duran los neumáticos, ya que son uno de los componentes más importantes para la seguridad y eficiencia de un vehículo. Desde el estilo de conducción hasta las condiciones climáticas, pasando por el mantenimiento y la calidad del neumático, en este post vamos a explorar cómo cada uno de estos elementos juega un papel crucial en determinar su vida útil.

La duración de los neumáticos se ve afectada por factores como la rotación, el equilibrado, la alineación, las condiciones climáticas y el almacenamiento adecuado

Cuánto duran los neumáticos de un coche

De manera general, se puede decir que se deben cambiar las ruedas cuando el neumático pierde sus propiedades. Esto suele ocurrir entre los 50.000 y los 70.000 kilómetros, pero claro, cambiar el neumático en este rango depende mucho del tipo de goma del que estén hechos y de la conducción que se haga.

Aunque es importante seguir los consejos de los fabricantes de neumáticos, hay que tener en cuenta los siguientes factores:

1. Tipo de neumático y calidad del material

En el caso de los neumáticos, en gran medida, si duran más kilómetros o no depende del tipo y calidad, como los de verano, invierno o los todoterreno. 

Los neumáticos de invierno, que están diseñados para bajas temperaturas, se pueden desgastar más en condiciones cálidas. Por otro lado, la duración de los neumáticos está directamente relacionada con la calidad del material. Los neumáticos de alta calidad, fabricados con compuestos avanzados y tecnologías de fabricación innovadoras, duran más, ya que resisten mejor el desgaste y rinden mejor en diversas condiciones.

2. Condiciones de conducción y uso

La vida útil de los neumáticos dependerá también del estilo de conducción. Si es agresivo, con aceleraciones y frenadas bruscas, puede reducir significativamente la vida útil de tus neumáticos en comparación con una conducción más suave y moderada.

Además, el uso frecuente en terrenos difíciles o condiciones climáticas extremas, como caminos irregulares o temperaturas extremadamente altas o bajas, también puede acortar su vida útil.

Muchas personas se fijan en el estado de los neumáticos en la revisión de un coche de segunda mano ya que puede evidenciar el cuidado general que ha recibido el vehículo. Un desgaste irregular o excesivo puede ser indicativo de mantenimiento deficiente, problemas de alineación o suspensión.

3. Mantenimiento y cuidado de los neumáticos

La rotación cada 8.000 – 10.000 kms es fundamental para un desgaste uniforme con carga y velocidad. Y es que los neumáticos delanteros y traseros experimentan cargas y desgaste diferentes debido a la dirección y la tracción.

Unos neumáticos equilibrados, por otro lado, evitan las vibraciones y garantizan un desgaste uniforme de los mismos. Piensa que el desequilibrio puede derivar en problemas de conducción y desgaste irregular. Por ello, es recomendable realizar el equilibrado después de cambiar neumáticos o llantas, contribuyendo así a una conducción suave y alargando la vida útil de los componentes.

La alineación de las ruedas también influye en el desgaste de los neumáticos y en la estabilidad del vehículo. Así, posibles golpes o impactos pueden alterarla, lo que resulta peligroso.

Por último, la presión es básica en el rendimiento y la eficiencia de tu coche. La presión baja desgasta y hace que el coche consuma más. Por ello, verifica y ajusta la presión en frío.

4. Carga y peso del vehículo

Un vehículo con peso excesivo puede tener gomas que duren menos. Ten en cuenta que esto genera más presión en el neumático, lo que hace que la banda de rodadura se gaste más. Por si esto es poco, también puede hacer que la temperatura de las ruedas aumente, y esto afecta a la profundidad del dibujo, que debe ser, como mínimo, de 1,6 mm.

Distribuir la carga es una buena idea, de modo que el dibujo de la goma no sea inferior a 1,6 milímetros, entre otras cosas. Para ello, respeta las especificaciones del fabricante, distribuye la carga para compensarla, y haz revisiones de la presión.

5. Condiciones climáticas y almacenamiento

Las condiciones climáticas también influyen en los neumáticos, y mucho. Por ejemplo, el calor excesivo puede acelerar el desgaste de la banda de rodadura y comprometer la elasticidad del caucho. Y, por otro lado, las bajas temperaturas pueden hacer que el caucho se vuelva más rígido, disminuyendo la adherencia y la distancia de frenado. Por su parte, la humedad puede propiciar la oxidación de los componentes metálicos de las llantas, debilitando así su integridad estructural.

Como recomendación, realiza inspecciones regulares para detectar posibles daños y verifica la fecha de fabricación para tener en cuenta la edad, ya que tienen fecha de caducidad.

En resumen, la duración de los neumáticos se ve afectada por factores como la rotación, el equilibrado, la alineación, las condiciones climáticas y el almacenamiento adecuado. Ante esto, una atención y el cuidado adecuado maximizará su vida útil. Por ello, es preciso hacer un mantenimiento regular para un funcionamiento óptimo de los neumáticos.